Seguro que has oído hablar en alguna ocasión del ácido hialurónico, pero ¿sabías que una de sus aplicaciones en ginecología es el tratamiento de la sequedad vaginal?
Sigue leyendo que te explicamos cómo.
El ácido hialurónico es una molécula de un “azúcar” que se encuentra ampliamente distribuida en nuestro organismo formando parte de la matriz extracelular de la piel, articulaciones y cartílagos. Tiene diferentes funciones y una de ellas es la de hidratar pues es capaz de captar agua hasta mil veces su peso molecular.
En el laboratorio se puede sintetizar ácido hialurónico y reticularlo en forma de gel para poderlo aplicar en la vagina y en el introito vulvar. Pequeños depósitos en forma de mesoterapia apenas imperceptibles son capaces de atraer moléculas de agua para mantener la hidratación natural, a la vez que producen una bioestimulación natural sobre las células de la dermis para que se produzca de nuevas fibras de colágeno.
Muchas mujeres sufren en la menopausia molestias vulvares como prurito y dolor en el coitopor la atrofia en la mucosa vaginal ocasionada por la falta de estrógenos.
Afortunadamente, disponemos de muchos recursos terapéuticos para vivir la menopausia con plenitud y sin renuciar a la vida sexual.
Este tratamiento supone una alternativa o complemento a otros tratamientos clásicos para la sequedad vaginal como óvulos y cremas de aplicación vaginal.
Es un tratamiento seguro, pues el ácido hialurónico aplicado es idéntico al que tenemos en nuestro organismo y como el nuestro, será metabolizado.
Con una aplicación en consulta se consigue mejorar la hidratación vaginal y se mantiene el efecto entre 9 meses y un año. Pasado este tiempo podemos repetir el tratamiento si se precisa.
No dudes en consultarnos si sufres sequedad vaginal y te asesoraremos. Cada mujer es única y el tratamiento siempre es personalizado.